domingo, 31 de marzo de 2024

CIVILIZACIÓN O BARBARIE, LOS MENORES Y EL DELITO




Sé que muchos creen de buena fe que hay que bajar la edad de imputación y condenar menores que delinquen como si fueran adultos.

Yo no lo creo. 

Para los menores hay que contemplar un régimen diferenciado, ni puerta giratoria ni condena de adultos.

Los jueces son los principales responsables de la reincidencia de menores porque han hecho práctica usual la liberación cuasi automática y devolverlos al entorno familiar / social que los alienta a delinquir.

Esos jueces incurren en prevaricato y se lavan las manos con la complicidad de la política. Si por cada menor con un historial delictivo que siendo liberado comete un homicidio hubiera un juez destituido, hace tiempo que los jueces no se tomarián a la ligera el resguardo de los menores. Porque no hay que olvidar que los jueces tienen, como siempre tuvieron, atribuciones suficientes para disponer el resguardo de menores en riesgo. La ley no les obliga a la liberación inmediata ni devolverlos al mismo entorno que los alienta a delinquir.

La adolescencia es una etapa particulamente difícil porque es la que se atraviesa con mayor cantidad de incógnitas a resolver y básicamente consiste en tomar conciencia. Ni más ni menos. Asunto complicado, por cierto, ir de las fantasías de la niñez a las responsabilidades del adulto. Esa complicación evidente hace suponer que existe una relación estrecha entre adolecer y adolescente aunque no tengan un orígen etimológico común. Y es que más allá de ser palabras parecidas, sus respectivos significados de origen: doler y crecer, se complementan. Transitar la adolescencia no solamente es crecer, es también afrontar el dolor de crecer. Que según las circunstancias de cada quien, siempre distintas, podrá doler en menor o mayor medida, pero en ningún caso la adolescencia es indolora. 

Cuando un menor comete delitos graves algunas veces obra por estupidez, porque aun no creció, no está formado, pero muchas más veces y es lo que debe preocuparnos, es porque aprovechándose de sus vulnerabilidades, todo aquello que le falta para formarse, hay adultos que los usan.

El caso del menor que en Rosario asesinó a Bruno Bussanich en una estación de servicio, es un claro ejemplo de ello. Obviamente es usado por adultos. Y esos adultos no deberían ver nunca más la luz del sol: son irrecuperables. Completamente irrecuperables.

Por regla general creo que los menores son recuperables. Por supuesto no ignoro que hay quienes siendo menores delinquen con la misma convicción de un adulto, cosa que también debe contemplar el régimen diferenciado.

Luego hay quienes dicen, con lógica, que si los menores pueden votar o decidir por sí abortar también deben poder ser condenados como adultos.

Mi posición es que no deberían votar ni tampoco decidir abortar por sí: son menores. No deben ser usados ni por delincuentes ni por políticos.

Por supuesto no estoy proponiendo que los menores deban ser impunes, deben ser juzgados con un régimen diferenciado y conforme a la gravedad del delito no ser liberados mientras sean un peligro real para sí mismos o los demás.

Décadas de decadencia causando daño institucional y degradación cultural han generado un impulso de miseria intelectual por el que muchos braman enardecidos proponiendo ante cada problema otro parche legal, como los tantos ya zurcidos a nuestra legislación, esperando una solución instantánea. Pero no hay soluciones mágicas cuando durante décadas se consolidó una democracia de muy baja calidad. Hay así quienes creen que se puede importar a la Argentina, como una franquicia de seguridad, el modelo con el que el Presidente Bukele supo responder a la particular situación de El Salvador. El mismo Bukele ha desaconsejado ese camino, porque entiende que Argentina es otro cuadro de inseguridad.

Sostengo que la Seguridad Interior debe ser entendida como una cuestión cultural, lo que entre otras cosas significa que desde 1983 a hoy Argentina se empantanó en su adolescencia en lugar de completar el tránsito, como se suponía, a su edad adulta. ¿Y cómo es que el país prolonga su adolescencia? Inventándose un trauma del que se niega a salir: la falsa culpa de un genocidio inexistente. Y otra vez lo digo: un país que condena con saña a sus defensores entrega su futuro al enemigo. Ese futuro ya llegó, hace rato.

Suponer que seguir poniendo parches sobre parches va a confeccionar un traje y no un disfraz de payaso es fruto de esa adolescencia de país retardado que padece la Argentina.

Reaccionar con un espasmo para cada noticia hiere al fin la noción de Justicia, la turba irracional y temerosa quiere linchamientos. Y en este punto es donde el Estado debe ser el comisario del western que, colt a la cintura y winchester en mano, impide que alcohol mediante ahorquen al detenido frente al saloon del pueblo. 

Nadie se confunda al leer. Yo no me opongo a la pena de muerte, me opongo a la barbarie. La civilización es la elección moral del camino difícil y aunque muchos se ogusquen, voy a dar un ejemplo de lo duro que puede ser construir civilización. 

Supongamos que un menor me mata, por supuesto no debe quedar impune, pero mientras la barbarie solucionaría el asunto muy fácilmente, ya sea no haciendo nada o poniéndole fin a su vida, dos formas bárbaras de rematar a la víctima, la civilización busca evitar que la víctima muera dos veces. Porque si además de morir yo el mocoso en cuestión va a ser ejecutado, no se estaría honrando mi vida. El modo de honrar mi vida sería lograr que mi asesino crezca y se convierta en algo honesto y útil. No espero que todos lo entiendan. Sé que es difícil. También sé que hay cosas a las que una sociedad organizada no puede renunciar resignándose al fracaso.

El punto es que suponer que todo sea igual para encarcelar es tan fácil como el zaffaronismo, que pretende sea todo igual para excarcelar. Salvo con los militares, claro, que por razones de la propia ideología a la que sirve el zaffaronismo vienen a ser para ese sistema la excepción que confirma la regla.

El sentido común y la planificación profesional de la Seguridad Interior no va por la fácil.

Los chivos expiatorios son el alimento de las sociedades cobardes. Quiero creer que los argentinos seguimos teniendo el alma de aquel Pueblo de Mayo, que hizo de sus convicciones y valentía la razón de su orgullo.


Ariel Corbat, La Pluma de la Derecha,
un liberal que no habla de economía.

jueves, 21 de marzo de 2024

LA VIOLENCIA NO ES COSA NUESTRA Y LAS MENTIRAS TAMPOCO.

Elena Cruz y Fernando Siro.
Agredidos por la intolerancia de los que no tienen argumentos.

Antes que ir al fondo del asunto, corresponde aclarar que cuando en este artículo digo "nuestro", "nosotros" o con cualquier otra expresión hago referencia a un grupo del que formo parte, estoy refiriendo genéricamente al conjunto de ciudadanos que sumando el 56% del electorado hizo Presidente a Javier Milei, y más específicamente a quienes votamos por estar consustanciados con las ideas de la Libertad.

Ese 56% por sobre muchos matices es respetuoso de la Constitución Nacional y sus valores. Y en cuanto a los liberales el propio Javier Milei ha repetido en infinidad de ocasiones esta definición de Alberto Benegas Lynch (h): "El liberalismo es el respeto irrestricto del proyecto de vida del prójimo, basado en el PRINCIPIO DE NO AGRESIÓN y en defensa del derecho a la vida, a la libertad y a la propiedad".

Muchos de nosotros tenemos opiniones fuertes, provocadoras y polémicas, pero las bancamos con argumentos a cara descubierta. Es una obviedad entonces que ninguno de nosotros promueve la violencia ni atentar contra la vida de nadie. 

Pero a veces lo obvio tiene que ser subrayado y es el caso. La agrupación de hijos de terroristas castristas conocida como HIJOS, ha denunciado un atentado político a través de un comunicado de prensa con el siguiente texto: 

"Denunciamos el atentado político contra nuestra compañera militante de H.I.J.O.S, cuya identidad preservamos, que fue atacada por dos individuos que la esperaban dentro de su domicilio, luego de forzar la puerta e ingresar ilegalmente. Ella fue atada, golpeada, abusada sexualmente, nuestra hermana sufrió amenazas de muerte de parte de sus captores.

Los atacantes, la amenazaron con armas de fuego y le transmitieron con claridad el mensaje: «No vinimos a robarte, vinimos a matarte. A nosotros nos pagan para esto».

Este atentado contra su vida es un ataque político, motivado por su militancia en derechos humanos y feminista. Nada de valor económico fue robado, sólo se llevaron carpetas con información de nuestra agrupación, H.I.J.O.S.

Los autores materiales del hecho pintaron en la pared la sigla «VLLC». (Viva la libertad carajo).


Estos hechos tienen un claro correlato con las acciones y discursos de odio que las máximas autoridad del país expresan cotidianamente e incita a la violencia contra quien militamos por los Derechos Humanos. Desde la Red Nacional de H.I.J.O.S. exigimos el inmediato esclarecimiento del hecho por parte del poder judicial y hacemos responsable al gobierno nacional de los hechos ocurridos.

A días de cumplirse un nuevo aniversario del golpe de Estado, afirmamos que nuestro pueblo dijo: Nunca Más. Memoria, Verdad y Justicia, siempre".

Corresponde al Poder Judicial esclarecer el hecho, si es que existió. Pero así como es narrado resulta tan burdo el móvil y modus operandi de los perpetradores como la intencionalidad política con que se relata. Ante cosa tan burda, razonablemente, la principal hipótesis es una opereta de falsa bandera.

No digo que no pueda haber estúpidos entre nosotros, los hay en toda multitud, pero hay que ser demasiado estúpido (casi al nivel de aquellos "estúpidos imberbes") para darle argumentos a los desesperados izquierdistas que, previendo el fin de la estafa con los desaparecidos y negociados varios con los derechos humanos, desde antes de la asunción del Presidente Milei quieren emparentar su gobierno con la anteúltima dictadura conocida como Proceso de Reorganización Nacional. La última fue kirchnerista y la recordamos en su apogeo como "infeKtadura".

El hecho tal como se relata es absurdo: Van a matar pero no matan, intimidan pues, dicen que obran por encargo y dejan escrito en la pared lo que identifica a los supuestos autores intelectuales. Y los hijos de terroristas no dudan en decir que es responsabilidad del gobierno nacional. 

No nos dicen quién es la víctima del "atentado político" para preservar su identidad, aunque seguramente es de una importancia tal que al intimidarla a ella los autores intelectuales del hecho, el gobierno nacional según el comunicado, obtendría algún rédito, que vaya uno a saber cuál sería y qué estudio de costo/beneficio lo pudo haber determinado. Ridículo.

Oportunamente, lo hacen público a pocos días del 24 de Marzo cuando organizan actos alusivos al golpe de Estado de 1976, marcadamente politizados desde visiones sesgadas por intereses varios; muy burdo. Y de tan burdo preocupante: ¿Volverán las organizaciones de derechos humanos, partidos políticos, sindicatos y demás participantes a reivindicar a viva voz la lucha armada del ERP y Montoneros como lo hicieron en la marcha del 24 de Marzo de 2017? En aquella ocasión Mauricio Macri presidía el país y ni él ni ninguno de sus funcionarios salió a exponer esa aberración antidemocrática. Porque Macri, progre, gobernó como un tibio. Veremos ahora si se animan a boquear eso mismo, cuando quien gobierna no es progre ni tibio.

El tufo a opereta que larga el comunicado de los hijos de terroristas recuerda el olor a olla podrida cuando en 2018 Corina de Bonis denunció que al salir de su casa la secuestraron, la subieron al asiento trasero de un auto, la encapucharon y con un cuchillo le escribieron en su generosa panza "ollas no", en alusión a las tareas que realizaba en un comedor. En aquella ocasión rápidamente salieron los kirchneristas a denunciar poco menos que la dictadura de Macri, y los progres (esos idiotas útiles de la izquierda) a solidarizarse con la "victima". Pero la víctima resultó no ser víctima, sino actriz de un atentado fraguado.

Algo más impulsivo, pero igualmente claro, tuvo lugar en Junio de 2023 cuando una militante de izquierda detenida en Jujuy al momento en que iba a ser subida al patrullero estampó su cabeza contra el vidrio de la puerta. Lo hizo con la clara intención de decirse víctima de la policía, pero por suerte alguien filmó el momento de su cabezazo. Quedó un blooper divertido, pero pudo no tener nada cómico si los policías se hubieran tenido que comer el garrón de ser falsamente acusados.

Es un clásico de la izquierda ponerse en víctimas. Les ha dado resultado político y económico. A todas luces parte de su estrategia en la lucha por el poder. Y una estafa al Estado, razón por la que hoy ya hay en marcha  una campaña de las izquierda y sus orgas de derechos humanos para victimizar a los narcos. 

Toda organización terrorista instruye a sus miembros para victimizarse si son detenidos. La mentira es parte esencial del terrorismo, porque más que razones necesita excusas para matar. Los padres de los que hoy revistan en HIJOS, por caso, mataban en nombre de una revolución dirigida desde Cuba que venía a liberar a los oprimidos, a hacer un mundo mejor aunque para llegar a hacerlo debieran ser máquinas de matar como enseñaba Ernesto Guevara. Y ahí está la más rancia dictadura de América para oprobio de los cubanos hace más de 60 años.

Y finalmente, al margen de todas estas consideraciones, ¿por qué deberíamos creer algo de lo que diga la organización de los hijos de terroristas? A priori no les podemos creer nada, no tienen credibilidad porque con una morbosidad repugnante mienten 30.000 desaparecidos y un genocidio que no fue. Mienten, tal como han mentido los testigos de los llamados "juicios de lesa" en el prevaricato más escandaloso de la historia argentina. 

Con el kirchnerismo la izquierda logró impunidad para mentir, algo que recién ahora se les está terminando.

Para ilustrar esta nota elegí la foto de Elena Cruz y Fernando Siro cuando por decir sus verdades fueron agredidos por la izquierda. Fue en septiembre de 2003, a poco meses de iniciado el régimen kirchnerista. La violencia de los escraches impuso una censura impropia de cualquier democracia. 

Entonces, hijos de terroristas, no les creemos absolutamente nada. Porque la violencia no es cosa nuestra y las mentiras tampoco.

No son 30.000.
No fue genocidio.
Es estafa con los desaparecidos.
Libertad a los vencedores del terrorismo castrista.

Ariel Corbat, La Pluma de la Derecha,
un liberal que no habla de economía.

miércoles, 13 de marzo de 2024

SOBRE EL ATAQUE AL SUPERPETROLERO HÉRCULES (un recuerdo personal)


Allá por 1998 Mariano Iglesias formó la productora de contenidos televisivos Cambio de Signo y me  convocó para hacer la investigación histórica y el guión de "Ius Soli", un programa documental sobre cuestiones de soberanía que en una primera etapa se enfocaría en la cuestión Malvinas. 

En ese contexto formamos un equipo con el que grabamos muchas entrevistas, recuerdo muy particularmente la que hicimos al Contraalmirante Carlos Robacio en su domicillio de Bahía Blanca. Si la entrevista había sido franca, al apagar la cámara ya compartiendo café los dos tuvimos una charla en off, algo que ocurría frecuentemente y donde el entrevistado confíaba cuestiones que por el momento prefería mantener en reserva. 

Por supuesto, respetábamos el off aunque por lógica fuera a veces más sustancioso que la charla en on.

En lo que respecta a las acciones de la Fuerza Aérea Argentina contábamos con el asesoramiento directo del Vicecomodoro (RE) Juan Manuel Beverina, un tipo fenomenal. 

Vicecomodoro Juan Manuel Beverina y Ariel Corbat,
Base Aérea de Tandil, 1998.

Gracias a Beverina visitamos unidades militares, entrevistamos a varios pilotos de la Fuerza Aérea y en los off tomamos conocimiento del ataque por error a un barco petrolero y que se mantenía no en secreto -algo no es secreto cuando el enemigo la sabe- pero sí en estricta reserva para no hacer olas frente a reclamaciones legales en fueros internacionales. 

Si bien la historia era interesante para ser contada, nunca pensamos en hacerla pública porque entendíamos las razones por las que convenía dejar pasar el tiempo. Además abundaban otras historias de acciones de la Fuerza Aérea que prioritariamente era necesario conocer y a eso queríamos contribuir.

Téngase presente que en aquella época la desmalvinización era muy fuerte. Lo registramos filmando encuestas callejeras en distintas ciudades en las que preguntas como ¿Qué opina Ud. de la Guerra de Malvinas? obtenían por respuesta un derrotismo absoluto y vergonzoso. Pero, siempre hay un pero desde que Passo habló en aquel Cabildo de 1810, si eso era lo que desde los medios y la política se inculcaba en la población, el fuego en la llama de la Malvinización se encendía cuando dirígiamos las preguntas hacia las acciones de combate, por caso ¿Qué opina Ud. de los pilotos argentinos durante la Guerra de Malvinas? Las respuestas allí desafiaban a la desmalvinización por un orgullo incontenible. No era momento para que se conociera y discutiera el asunto del petrolero bombardeado.

Hace ya tiempo que el uso creativo dado a los aviones Hércules como bombarderos se ha reconocido valorando la audacia de sus tripulaciones, lo que permite poner en su debido contexto el ataque al petrolero Hércules.


Me alegra sobremanera que le estemos ganando la pulseada a la desmalvinización, aceptando las verdades de la guerra sin verlas con las anteojeras antiargentinas que por interés e ideología se quisieron imponer.

Las grabaciones de la que iba ser la serie documental Ius Soli, nunca tuvieron oportunidad de lograr pantalla. Era un emprendimiento privado y no se pudo comercializar por falta de anunciantes. Era 1998, repito, y los posibles anunciantes nos decían "Malvinas es un bajón". 

En lo personal aquella experiencia me dejó la alegría de haber tenido oportunidad de ahondar sobre hechos que me apasionan y también la amargura de no haber podido compartirlo.

Debo destacar que todos los costos de producción del proyecto documental Ius Soli fueron afrontados por Mariano Iglesias sin que nunca se quejara por lo que objetivamente resultó una mala inversión. Acaso un primer ataque de la batalla cultural que entonces muy pocos daban.

Supo entender Mariano que no da quejarse cuando se obra por respeto a la sangre, por patriotismo. Pero, otra vez un pero como aquel de Juan José Passo en 1810, creo que finalmente no todo ha sido pérdida, me consuela creer que esfuerzos como aquel contribuyeron en definitiva a cambiar la mirada en todo sentido victimizante sobre Malvinas para ir recuperando la visión de gesta.


Ariel Corbat, La Pluma de la Derecha,
un liberal que no habla de economía.

miércoles, 6 de marzo de 2024

A VER SI LA VEN



Veo las noticias policiales del día y me impacta, más que la sangre diaria, la nota sobre dos hermanas que decidieron tapiar parte de su casa luego de ser asaltadas en su vivienda de Ramos Mejía.

Una entradera, hora y media de 2 mujeres mayores a merced de los delincuentes en su propia casa y el botín es el medidor de agua...

Y esto mientras nos venimos fumando al gobernador Axel Kicillof saraseando Estado presente embanderándose de solución antiajuste.

Provincia de Buenos Aires tiene el gobierno de la delincuencia, por la delincuencia y para la delincuencia.

Cada día se me hace más evidente que Axel Kicillof tiene la deliberada intención de dejar estallar la inseguridad en Provincia de Buenos Aires para fogonear un estallido social contra el gobierno nacional.

Sí, es una estrategia perversa y estúpida. Pero es Kicillof, el que se jactaba de tener todo estudiado...

Hoy la principal preocupación de Seguridad Interior no es Rosario sino el Conurbano Bonaerense.

Lo que la pasividad interesada del gobernador Kicillof está generando todavía no se llega a dimensionar en toda su proyección y consecuencias.

Y no se observa por parte del gobierno nacional la decisión de poner en evidencia el desmadre bonaerense. Hay una cierta prescindencia, sobre la que podría especularse largamente pero que tal vez pueda entenderse en el desdén con que el Ministerio de Seguridad de la Nación contempla la evolución de la violencia barrabrava.

Con diferencias y similitudes Rosario y el Conurbano Bonaerense son dos realidades distintas.

Una de esas similitudes son las cloacas del fútbol, donde indudablemente la podredumbre está entrando en efervescencia y se manifiesta violentamente.

Determinar el horizonte hacia el que conduce la exhibición de violencia que vienen haciendo barrabravas es tarea de la Dirección Nacional de Inteligencia Criminal, DNIC, a cargo de Ricardo Ferrer Picado.

Sin esa tarea de Inteligencia la evolución del problema no podrá ser intervenida y controlada. 

No parece la ministro de Seguridad Patricia Bullrich comprender lo que está ocurriendo con el lumpenaje futbolero, tal vez no ha recibido ningún Parte de Inteligencia sobre ello, o eligió ignorarlo por mantener al estudiante de 25 años Franco Berlín, su chofer, como director de seguridad deportiva. ¿Cómo saberlo?

De lo que sí podemos estar seguros es que la mugre que traen las cloacas del fútbol supera la capacidad de Franco Berlín.

Es que su falta de idoneidad lo reduce a ser el administrador de un excel, cuando lo que se necesita es un funcionario apto, proactivo y de perfil combativo.

Téngase presente que cuando Mauricio Macri designó a Bullrich ministro de Seguridad le impuso como segundo a Eugenio Burzaco, el Presidente Javier Milei en cambio le entregó el ministerio sin ningún condicionamiento; y todos sabemos que LLA tenía otro proyecto para el área. ¿Esto que significa?

Significa que en su primera gestión como ministro de Seguridad Bullrich no era enteramente responsable de ciertas designaciones de funcionarios. Pero dado el pleno aval del Presidente Milei hoy sí lo es, por lo tanto es puramente su error la permanencia de Franco Berlín.


Ariel Corbat, La Pluma de la Derecha,
un liberal que no habla de economía.

LA SONRISA DE JAMES COBURN

LA SONRISA DE JAMES COBURN