domingo, 28 de enero de 2024

AMNISTÍA INTERNACIONAL ENQUISTADA EN LA ONU PROMUEVE EL CAOS EN ARGENTINA




El 23 de Enero de 2024 tres relatores especiales de la ONU, Clement Nyaletsossi Voule (Relator Especial sobre los derechos a la libertad de reunión pacífica y de asociación), Irene Khan (Relatora Especial sobre la promoción y protección del derecho a la libertad de opinión y de expresión) y Mary Lawlor (Relatora Especial sobre la situación de los defensores de derechos humanos),  emitieron un documento referido a la República Argentina con observaciones al denominado "protocolo antipiquetes" y al proyecto de Ley bases y puntos de partida para la Libertad de los argentinos.

El mismo puede leerse a través del siguiente enlace:


Cabe consignar que los tres relatores firmantes comparten algo más que puestos de relatores especiales en la ONU, porque tanto el togolés Voule, como la bangladesí Khan y la irlandesa Lawlor son viejos activistas de Amnesty International, la ONG británica creada en 1962 con la supuesta finalidad de lograr la vigencia global de todos los derechos humanos proclamados en la Declaración Universal de Derechos Humanos.

Es claro que Amnesia Intencional, ¡ups!, corrijo: Amnistía Internacional, aunque declare que: "Somos independientes de toda ideología política, interés económico y religión" no es independiente en ninguna de esas categorías, porque es ideológicamente de izquierda, responde a los intereses económicos del globalismo y tiene por religión al progresismo. Tres razones por las cuales busca y logra enquistarse en organismos como las Naciones Unidas.

En consecuencia, Amnesia Intencional, ¡uy! otra vez mi confusión, ejerce una defensa selectiva de los derechos humanos en la que, por ejemplo, jamás ha manifestado reparo alguno hacia el prevaricato más escandaloso de la historia argentina que son los juicios de revancha, inconstitucionales todos ellos, contra quienes vencieron al terrorismo castrista en la Guerra Antisubversiva. 

Ninguna muestra de interés por los derechos humanos de esos presos políticos, para los cuales no hay garantías del debido proceso ni respeto por su dignidad humana. Sin embargo cuando el terrorista del MTP Antonio Puigjané fue condenado por el ataque contra el Regimiento de la Tablada, que es decir contra la democracia argentina, Amnistía Internacional lo calificó como "preso de conciencia".  

Y ni hablar de la militancia abortista con la que la sede local de la ONG británica pretende impedir que se revise la inconstitucional ley de aborto, punto que viene a cuento porque, como veremos a continuación, marca la hipocresía con la que los activistas de Amnistía Internacional pretenden interpretar las normas constitucionales argentinas desde organismos internacionales.


Los militantes que Amnistía Internacional logró enquistar como funcionarios de la ONU, argumentan que "el Comité de Derechos Humanos, órgano encargado de vigilar el cumplimiento de las obligaciones contenidas en el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos - el cual ha sido ratificado por Argentina y tiene jerarquía constitucional (art. 75 inc. 22 de la Constitución de la Nación Argentina) - reconoce que las afectaciones a la libertad de circulación, intencionadas o no, pueden ocurrir y por lo mismo, no ponen en entredicho la protección de la que gozan esas reuniones por parte del derecho internacional".

Al margen de otras consideraciones que hacen a la interpretación de los tratados internacionales en su incorporación al Derecho Constitucional Argentino, acaso maliciosamente omiten los relatores considerar que si bien la Constitución de la Nación Argentina confiere jerarquía constitucional a determinados tratados, también establece un orden jerárquico dentro de las normas constitucionales. En razón de ese orden, el rango constitucional de los tratados está subordinado a la supremacía absoluta de la primera parte de la Constitución Nacional. 

En efecto, el citado Artículo 75 Inc 22 de la Constitución Nacional establece la subordinación de los tratados internacionales con el siguiente texto de claridad meridiana: "en las condiciones de su vigencia, tienen jerarquía constitucional, no derogan artículo alguno de la primera parte de esta Constitución y deben entenderse complementarios de los derechos y garantías por ella reconocidos".

Por la más elemental lógica jurídica, va de suyo que si los tratados incorporados con rango constitucional no pueden derogar artículo alguno de la primera parte de la Constitución Nacional es porque sus disposiciones tienen una jerarquía inferior, meramente complementaria y subordinada a los 43 artículos que declaran derechos y garantías. Y cabe subrayar: derechos y garantías que hacen a la coherencia de un orden que tiene por finalidad alcanzar los objetivos enumerados en el Preámbulo, entre ellos: consolidar la paz interior. Es decir, derechos y garantías que sólo pueden existir dentro de un orden, porque no son viables en el caos.

Muy obviamente los relatores de la ONU no interpretan las normas argentinas en función del interés de la Nación Argentina, sino en función de intereses como los que representa Amnistía Internacional y otros grupos de presión. 

Para darse cuenta de ello basta ver el modo en que militan la conservación de la ley de aborto, a efectos de lo cual olvidan selectivamente que  la Convención sobre los Derechos del Niño, fue aprobada en 1990 por medio de la Ley Nº 23.849, que ordena ratificar la misma formulando la siguiente declaración: "Con relación al artículo 1º de la Convención sobre los Derechos del Niño, la República Argentina declara que el mismo debe interpretarse en el sentido que se entiende por niño todo ser humano desde el momento de su concepción y hasta los 18 años de edad".

Es muy revelador de las intenciones de Amnistía Internacional a través de estos relatores de la ONU, que en su afán de imponer su agenda a países como la Argentina finjan a conveniencia respeto por las normas constitucionales.

Los relatores eligen ignorar tanto las distintas jerarquías dentro de las normas constitucionales, como la realidad que da sentido a la interpretación de las normas jurídicas en tanto reguladoras de conductas intersubjetivas. 

Ven así sólo la parte de la realidad que conviene a los activistas, dejando completamente de lado las del resto de la población que ha manifestado, con claras repercusiones en elecciones democráticas, su hartazgo por el constante caos por el que cualquiera quedaba expuesto, ante un corte de calles, a no poder disponer de su tiempo ni ejercer ninguno de sus derechos constitucionales, porque algún grupo -a veces apenas unas pocas personas- decidía protestar interrumpiendo el tránsito.


Al conocerse el proyecto de la (para abreviar) Ley Ómnibus, critiqué por absurdamente inconstitucional la pretensión de exigir permiso previo del Estado para reuniones no masivas que no afectan el orden ni los derechos de terceros (SEGURIDAD: UN ACIERTO Y UN ERROR EN EL PROYECTO DE LEY ÓMNIBUS). 

Esa exigencia propia de Cuba o cualquier otra dictadura comunista, repugna al orden de la Libertad del estilo de vida propiciado por la Constitución de la Nación Argentina.

Pero ese despropósito metido en el proyecto de la Ley Ómnibus, de ningún modo puede corregirse quitando a las instituciones del Estado la facultad de garantizar el orden dando vía libre a los activistas. Nadie está pretendiendo en Argentina impedir el derecho a la protesta ni buscando criminalizar la protesta social, el punto es mucho más sencillo: se trata de recordar que el hecho de la protesta no otorga impunidad frente al Derecho Penal, ni faculta a quienes protestan a imponer por la fuerza la prevalencia de sus derechos por sobre los de los demás. Pues no cabe olvidar que si hay un derecho a la protesta, también hay derecho a no protestar. 

En atención a lo que representa el documento emitido por los relatores especiales de la ONU, es preciso que la Canciller Diana Mondino tome medidas para defender el interés nacional, rechazando los cuestionamientos que constituyen una inaceptable injerencia sobre asuntos internos de la República Argentina.

Es claro también que estas observaciones, en apariencia dirigidas contra el Ministerio de Seguridad de la Nación, deberían ser analizadas por el ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona, a efectos de diseñar una estrategia de reafirmación nacional para la interpretación del Derecho Argentino frente a intereses extranacionales.

Resultaría perjudicial para los intereses de la Nación Argentina que el gobierno del Presidente Javier Milei mantenga, frente a este tipo de injerencias extrañas, la indiferencia convalidante de los anteriores gobiernos, que nunca han sabido plantar cara ni argumentos ante la intromisión degradante para nuestro orden jurídico.

Antes que aceptar críticas de la ONU, debería revisarse que tanto se ha desviado ese organismo de las finalidades que le dieron origen y preguntarse a qué intereses sirve su agenda. 

Hay que plantear seriamente poner distancia de la ONU para fijarle límites a la injerencia que los militantes de izquierda, globalistas y progresistas enquistados en ella pretenden darle sobre Argentina. 

No se puede permanecer con los ojos cerrados frente a lo que evidentemente son señales de desvirtuación de la ONU. Por caso, ahí está la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina (UNRWA), sospechada de haber brindado apoyo a los terroristas de Hamas que atacaron a Israel. ¿Cuántas organizaciones terroristas se han visto beneficiadas, directa o indirectamente, por medio de las Naciones Unidas? 

Es oportuno poner en la agenda de la Nación Argentina analizar la incompatibilidad de nuestros intereses con los de la Agenda 2030 de la ONU. Y en cualquier caso, es preciso reinterpretar los tratados internacionales bajo la absoluta supremacía de la primera parte de la Constitución Nacional.

Ariel Corbat, La Pluma de la Derecha,
un liberal que no habla de economía.

martes, 16 de enero de 2024

PATRICIA BULLRICH NECESITA CUIDARSE DE PATRICIA BULLRICH



El 3 de Enero de 2024 la ministro Patricia Bullrich publicó en su cuenta de X: 

TRES SOSPECHOSOS DE TERRORISMO DETENIDOS

Tres sospechosos de pertenecer a células terroristas están siendo investigados. Mientras el mundo está convulsionado y en Argentina se desarrollan los Juegos Macabeos. Por instrucción del presidente Milei, estamos más atentos que nunca para cuidar a los ciudadanos y a quienes nos visitan. 

A través de la PFA, la PSA y personal de la DINIC, en cumplimiento con la Justicia, a cargo de la Dra. Servini de Cubría, y en colaboración con agencias internacionales, se detectó el ingreso al país de los sospechosos. Todos detenidos y puestos a disposición de la Justicia.

El que las hace, las paga.

En una Argentina que todavía recuerda haber sufrido dos atentados terroristas de gran magnitud (aunque olvidó muchos otros) y que ante el brutal ataque de Hamas contra Israel comprende la posibilidad de padecer nuevos actos de terrorismo, la revelación de la ministro de Seguridad de la Nación no podía ser otra cosa que impactante, en especial para quienes hasta el 4 de Enero participaban de los Juegos Macabeos. Expresamente mencionados por la ministro.

No sé si al ciudadano promedio ese tipo de anuncios le da por suponer un "caso cerrado" para con ello despreocuparse en una consecuente y falsa sensación de seguridad, tan parecida a la indiferencia, pero sí sé que quienes tenemos alguna experiencia en estas cuestiones siempre preferimos la cautela.

Por eso ese mismo día, también en X, publiqué lo siguiente:

Ciertas cuestiones parecen celebrarse como si despidiendo humo se clarificase situaciones que siempre deben suponerse complejas. 

Hay asuntos donde conviene esperar mucho antes de festejar.

Callar y pegar. Por las dudas.

Quien lo entendió lo entendió y quien no pues no.

Cuando se judicializa y comunica una investigación de contraterrorismo en curso, si es que fuera necesario hacerlo, siempre debe hacerse del modo más despojado posible. Eso significa con parquedad institucional y, desde luego, sin ninguna clase de alarde. Porque hacerlo de otro modo puede tanto perjudicar la investigación como exponer instituciones y funcionarios a la crítica de sectores interesados.

Porque no puede obviarse que muy lamentablemente en Argentina hay sectores interesados en reivindicar a terroristas, ya sean los que intentaron imponer una dictadura castrista en los 70's, los que atacaron el Regimiento de La Tablada en 1989, los que atentaron contra las Torres Gemelas en 2001 o los que perpetraron el horror de Hamas contra civiles desprevenidos.

En ese sentido, cabe tener muy presente que el diario Página/12 fue fundado por Jorge Lanata merced a dinero mal habido del ERP y con la intención de hacer acción psicológica para el MTP del criminal Gorriarán Merlo. Es notorio que distintos integrantes de organizaciones terroristas han revistado en el staff de ese diario, cuya línea editorial, apenas disimulada por la clásica hipocresía izquierdista de mera conveniencia, es de constante ataque contra la Nación Argentina, Occidente, los valores de la cristiandad y las ideas de la Libertad. 

Frente a esos sectores es muy torpe regalarse con errores no forzados. Con un muy fuera de lugar "el que las hace las paga", que no aplica mientras prevalece la duda, la mala comunicación de la ministro Bullrich permitió que, por ejemplo, Raúl Kollman en Página/12 apreciara elementos para apostar al fiasco desde el momento del anuncio. Y así el curso de la investigación le dejó finalmente servida la nota que el diario filoterrorista publica en tapa con el título: "LA MENTIRA TIENE PATAS CORTAS La increíble historia del show antiterrorista de Bullrich que terminó en un papelón internacional". 

Lo sucedido puede ser otra anécdota que vaya a olvidarse, como muchas que describen la personalidad de la ministro Bullrich. Y en algún punto, mal que le pese a quienes (como el kirchnerismo todo) quieren que su gestión fracase, puede contar con ese olvido. 

Pero aquellos que apoyamos al gobierno del Presidente Javier Milei y queremos el éxito de su gestión en el Ministerio tenemos la obligación ética y moral de llamarla a la reflexión para que ella misma no lo olvide. Lo peor que se puede hacer por la ministro Bullrich es un "siga, siga" fingiendo que no ha cometido ningún error. 

Es preciso que la ministro tome conciencia del defecto en su comunicación que lleva a errores como este y se aplique a sí misma aquello de "el que las hace las paga". Su estilo de comunicación es malo y contraproducente, el mismo al que apelaba Sergio Berni. Y ya es tiempo de cancelarlo, de pagar las que hizo poniéndose un filtro profesional que se aferre al estilo parco de lo institucional y no festejar más que lo que como hecho consumado cabe festejar. Sin alardes.

En lo que marca una diferencia notoria con su primera gestión, en esta oportunidad es evidente que Patricia Bullrich se ha rodeado de mejores elementos, ya que no hay duda que Vicente Ventura Barreiro y Marcelo Romero están varios escalones de calidad por encima de personajes como Eugenio Burzaco y Gerardo Milman (dos por los que este ateo reza a Dios los tenga en su gloria como cadáveres políticos y no permita que vuelvan). Y también es una muy buena señal que no repita la acefalía en que mantuvo durante su primera gestión como ministro a la Dirección Nacional de Inteligencia Criminal (DNIC) y haya nombrado director a Ricardo Ferrer Picado.

El nuevo staff es un indicador positivo, sugiere que es intención de Patricia Bullrich no repetir los yerros del período 2015-2019, pero tal como le advertí en aquel entonces: la voluntad sin método deviene en voluntarismo

Finalmente, en un país cuyo Sistema de Inteligencia Nacional se encuentra severamente dañado (y estoy siendo moderado) la prudencia no solamente es aconsejable, es imprescindible. El error forzado puede justificarse, el error no forzado es inaceptable.

Bullrich, necesita cuidarse de Bullrich.


Ariel Corbat, La Pluma de la Derecha,
un liberal que no habla de economía.

miércoles, 10 de enero de 2024

ECUADOR ES UNA VOZ DE CONCIENCIA SOBRE ROSARIO


La gravedad de la situación desatada en Ecuador, bajo ataque del crimen organizado, es obviamente una advertencia para todas las democracias del continente americano sobre la necesidad de conservar para el Estado el monopolio de la violencia. 


Y digo expresamente "las democracias" y no el más abarcativo "los países" de América, porque las dictaduras como Cuba, Venezuela y Nicaragua son parte del problema en tanto cómplices funcionales del crimen organizado. 

No es el interés de este artículo explicar las razones del deterioro del poder coercitivo en el Derecho Ecuatoriano (que eso es jurídicamente lo que significa el resquebrajamiento del monopolio de la violencia), tarea que bien cumplen analistas internacionales dedicados a la región. Mirando a Quito, el interés de este artículo es preguntarnos por nuestra propia situación interna.

Cuando se olvida la razón de ser del monopolio de la violencia en poder del Estado y se lo debilita desde sucesivos gobiernos por experimentación progresista, los enemigos de la sociedad se hacen fuertes, ambicionan arrebatar ese poder y en un punto lo desafían abiertamente. Eso mismo que hace un tiempo viene sucediendo en Rosario.

Al igual que otros escenarios de América, Ecuador nos habla de Rosario. 

Y lo que nos dicen, traducido a la historia argentina, es que la zanja de Alsina fracasó, por lo que los planes defensivos o de contención ya no tienen ningún sentido y es preciso pasar a la ofensiva tal como durante la campaña de Roca: con planificación y determinación para alcanzar objetivos claros. Ofensiva real, no disuasiva; efectiva y no reactiva. 

Queda por dilucidar si el "Operativo Bandera", lanzado desde el Ministerio de Seguridad de la Nación, será otro despliegue más sobre Rosario, como los que se han visto a través de los años, o el punto de inflexión.

La marcha del tiempo no puede detenerse y de momento, al inicio de las operaciones, lo que se percibe es la cautela de los boxeadores estudiándose en el primer round.

Y la cautela es necesaria desde quienes conducen las fuerzas del Estado; porque no se trata de limitar la audacia, sino de darle valor a la audacia. O sea: no dejar que se consuma en vano. 

Téngase presente que el gobernador Maximiliano Pullaro, antes de cumplir un mes de mandato, debió extraer a su familia de la Provincia de Santa Fe por la credibilidad de las amenazas recibidas por parte de organizaciones criminales

Frente a ese cuadro de intimidación pública activa, cabe subrayar la premisa comunicacional que deberían seguir todos los funcionarios dedicados a ordenar la seguridad nacional y provincial: res non verba. Los políticos sensatos dejan a los hechos hablar por ellos, y sólo añaden su voz cuando esos hechos quedan consolidados.

"A nadie más de lo que deba saber", se enseña como derivado de la disciplina del secreto en operaciones de Inteligencia y aplica al caso. Porque si todos somos dueños de nuestros silencios y esclavos de nuestras palabras, quienes tienen responsabilidad de gobierno mucho más. Aunque aquí los políticos confíen en que todo pasa y se olvida

En tal sentido, ha cometido una imprudencia la ministro Patricia Bullrich al explicitar en el Congreso que desde el inicio Operativo Bandera no hubo un solo muerto en la Ciudad de Rosario. 

La imprudencia es obvia. No calculó la ministro el alcance que pueden tener sus palabras, olvidó que los narcos rosarinos ya han matado al azar para usar un cadáver cualquiera como mensaje mafioso y no contempló, tampoco, que si el gobernador pudo extraer a su familia de la provincia otras potenciales víctimas del narco no tienen esa posibilidad. Patricia Bullrich debe comenzar a entender que, por veraces que sean los datos, hay cosas que ella no debe decir, pues expone a terceros a la acción del enemigo. 

Entendiendo que la marcha del tiempo no puede detenerse, lo más auspicioso hasta ahora, como medida tendiente a liberar Rosario del empuje narco, ha sido la reciente sanción en la Legislatura Santafesina de la Ley de Inteligencia, porque indica cierto consenso político provincial que es imprescindible para ir con todos los recursos del Estado a por la recuperación del territorio. 

Urge llevar ese consenso político provincial a la categoría de consenso político nacional. Pero ¿será posible? Digamos que no es imposible, aunque de momento resulta improbable. Por distintas razones a vista de todos, como si a falta de amor muchos ahí esperasen que los una el espanto. Todavía más espanto.

Y es que combatir con efectividad a organizaciones narcotraficantes exige superar con sentido común heridas que sin ningún sentido común se eligió mantener sangrando durante años. Con todo lo que ello implica. 

La ministro demostró en una significativa carta de su campaña presidencial ser consciente de las injusticias que padecen los militares presos por vencer al terrorismo castrista. Y sabe también que esas injusticias se proyectan sobre todos los uniformados, porque hay prefecturianos que han sido condenados por el sólo hecho de cumplir con su deber en un enfrentamiento armado. 

Está última cuestión quedaría subsanada de aprobarse la ley de bases enviada por el Presidente Javier Milei al Congreso Nacional, pero no alcanzará por sí para revertir una cultura de subversión abolicionista impuesta durante años a favor de la delincuencia y perjuicio de los efectivos de las distintas fuerzas. 

Dudo mucho, opinión estrictamente personal, que la composición de ambas cámaras del Congreso permita romper la trampa en la que se dejó caer la Seguridad Interior gracias al kirchnerismo con el CELS, Zaffaroni y compañía, porque en muchas de esas bancas sientan su traste personas que consideran a Julio Argentino Roca un genocida y entre ellos varios que ni siquiera cantan el Himno Nacional.

Ecuador viene a despertar la incómoda voz de nuestra conciencia nacional, susurrándonos al oído que tenemos nuestros propios y graves problemas para siquiera plantearnos resolver los de otros. Hacer pública la disposición a enviar tropas al Ecuador, más allá de las cuestiones legales, excede la prudencia que corresponde cultivar.

Es público y notorio que la República Argentina está casi ciega en materia de Inteligencia: la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) fue dejada por el kirchnerismo en su nivel más bajo, por ende Inteligencia Criminal e Inteligencia Militar funcionan (en lo que funciona) al mínimo de sus capacidades. Mismas que se podrían recuperar relativamente rápido si un "Sr. 5" con plan y capacidad de liderazgo hace pie en 25 de Mayo 11.

Sin aumentar la capacidad actual de Inteligencia no alcanzará para hacer frente a la expansión de organizaciones trasnacionales sobre cuyo avance en territorio argentino vienen advirtiendo, desde hace mucho y con fundamentos, destacados especialistas en narcotráfico. 

Cierro: no malgastemos audacia. 


Ariel Corbat, La Pluma de la Derecha,
un liberal que no habla de economía.






martes, 2 de enero de 2024

CABALLEROS


En la esquina de Arcos y Paroissien, Núñez, estaba la casona de mis abuelos paternos Albina y Pedro. 

Entre tantas otras cosas recuerdo que en un cristalero instalado en el comedor se exhibía orgullosa una fotografía del hermano de mi abuelo con un atuendo particular. Era, según contaban mis abuelos, Caballero del Santo Sepulcro. Y también aquel por cuyo intermedio habían recibido la bendición papal que conservaban enmarcada en su dormitorio.  

Semejante título era una invitación a imaginar aventuras, como algunas que leía en la colección Robin Hood. 

Como tantas otras cosas, aquella foto se perdió a la muerte de mi abuelo, por lo que en mi fantasía (ya bastante grandecito, confieso) me quedó la idea de un caballero cruzado. Tal vez por eso en la pared de los recuerdos y adornos, del living de casa, sobre un estante tenemos una estatuilla de un cruzado con casco y espada. Tan así como mi recuerdo había quedado configurado. 


No era más que eso. Un recuerdo, la curiosidad por el que para mi padre y sus hermanos era el tío de Italia, que, una vez, les envió tres relojes de oro. El reloj a cuerda con malla de cuero negro que dio la hora durante años en la muñeca de mi viejo, hasta que se descompuso, quedó guardado vaya uno a saber dónde y se perdió.

Como tantas otras cosas. 

Este año lo inicié en Villa Carlos Paz, Córdoba, en casa de mi hermana. Acaso, hermosa palabra la palabra "acaso", porque nuestros ancestros reviven con cada recuerdo en alguna curva de charla apareció el recuerdo de esa foto y resultó que Silvia tenía otras fotos del tío de Italia: Ernesto Tamagnone.

Ernesto Tamagnone, 
Caballero del Santo Sepulcro.

Y ahí estaba, en fotos fechadas en 1953 y 1954, no con el uniforme de pelea de los cruzados con que quería recordarlo, sino con la elegante gala de quien junto a su firma escribía indistintamente "Caballero del Santo Sepulcro", "Cruzado del Santo Sepulcro de Jerusalén" o, muy simplemente, "Soldado de Cristo".


Renovada la curiosidad me interesó conocer algo más sobre los Caballeros del Santo Sepulcro. Así que hice lo que se hace en estos casos, recurrí al más católico de mis amigos, Mario Paso, mi hermano gorila, perdón: Gorila con mayúscula, para que me orientara en la búsqueda.

Y Mario, hombre sabio, me dijo que en efecto se trata de la Orden de los Caballeros del Santo Sepulcro de San Juan en Jerusalén, que todavía está vigente, señalando en las fotos la capa con la Cruz de Jerusalén.


Recurrí entonces a Google, ya saben: si lo dice Wikipedia lo aceptaremos como una verdad indiscutible, donde encontré información sobre la Orden Ecuestre del Santo Sepulcro de Jerusalén (Ordine equestre del Santo Sepolcro di Gerusalemme).

Fundada en 1098 por Godofredo de Bouillón, es reconocida como la Orden de Caballería más antigua del mundo. Con el devenir de la historia perdió su carácter guerrero así que, por unos cuantos siglos, el tío abuelo se perdió la acción novelesca.

Existe actualmente, y desde 1888, la Lugartenencia Argentina de la Orden de Caballería del Santo Sepulcro de Jerusalén.

Así, por ejemplo, la propia Orden recuerda que "en 1962 se incorporó como Caballero al Capítulo Argentino de la Orden el hoy Siervo de Dios Ing. Enrique Shaw, muerto a los 41 años, padre de 9 hijos y de destacadísima actuación en instituciones católicas del país, entre ellas fue fundador y primer Presidente de ACDE, Asociación Cristiana de Dirigentes de Empresa y Miembro del primer Consejo de la Pontificia Universidad Católica Argentina Santa María de los Buenos Aires,  Shaw orientó su vida según las bienaventuranzas evangélicas y su Causa de Beatificación y Canonización iniciada en 1998, ya se encuentra en Roma iniciando la fase final vaticana del proceso canónico".

También ha tenido un rol importante en revitalizar la Orden el historiador Isidoro Ruiz Moreno, a quien alguna vez entrevisté en su casa para un documental sobre Malvinas. También lo tuve como profesor unas pocas clases en la Escuela de Guerra. Una mente notable.

Como dije, hace mucho tiempo la Orden perdió su carácter guerrero, por lo cual cabe preguntarse: ¿Qué implica ser caballero hoy?

La misma Orden lo explica: "Un caballero se compromete a vivir las virtudes cristianas en unión indiscutible con el Romano Pontífice; a frecuentar la vida sacramental y a socorrer a los necesitados. Es un compromiso de vivir y desarrollar integralmente el llamado universal a la santidad (Concilio Vaticano II, Lumen Gentium, Capítulo V) dando así ejemplo de vida cristiana".

Como todos mis lectores podrán imaginar, por una insalvable cuestión de fe no podría yo emular la devoción del tío abuelo Ernesto Tamagnone, Caballero del Santo Sepulcro.

Sin embargo me gusta pensar que algo de eso igual conservo, porque el mejor elogio que recibí en mi vida, el que más me emocionó, me fue dado por el mencionado Mario Paso, cuando unos cuantos años atrás, tras leer la carta con la que yo renunciaba a un cargo en el Estado, me felicitó llamándome "Caballero de la República"; y aunque para muchos eso pueda no significar nada, para mí significa mucho.  Y sí, también entonces me acordé de aquel extraño título que ostentaba ese otro Tamagnone. 

Acompaño foto de mis abuelos, Albina y Pedro Miguel posando junto a sus tres hijos. El más alto de los "marineritos" es mi padre, José Santiago.

Albina del Valle de Tamagnone, Pedro Miguel Tamagnone,
Ernesto, Alberto y José Santiago Tamagnone.


Vale tomar conciencia de una reflexión final: algún día seremos los recuerdos que otros evocarán viendo fotos viejas. Ojalá sean buenos recuerdos. Así es la vida.


AC/LPD

LA SONRISA DE JAMES COBURN

LA SONRISA DE JAMES COBURN

TERRORISMO: NOSOTROS Y EL MIEDO