El lunes 21 de Agosto publiqué en Twitter la siguiente observación:
"Los juegos del saqueo en Córdoba y en Mendoza, son tan llamativos como la circulación de información vieja tratando de pasar por nueva.
La promoción de saqueos siempre intentó desmoronar al gobierno saliente, pero estos parecen apuntar a condicionar al entrante; cualquiera sea".
Luego con el correr de las horas surgieron otros hechos confirmados y a través de canales de televisión se conocieron imágenes de saqueos en el conurbano bonaerense.
Importa comprender para analizar la situación que no hay ninguna área de gobierno en la que el kirchnerismo acredite logros significativos para el mejor vivir de los argentinos. Por lo cual, con inflación e inseguridad al tope de sus fracasos, en las elecciones generales deberían tener menos votos que en las PASO.
Pero hay mucho voto cautivo de gente dañada con síndrome de Estocolmo y ningún prurito kirchnerista para recurrir a cualquier artimaña en pos de sumar como ganado votantes a ese "corral" (gráfica figura que, tal vez por ser veterinario y así gobernar Formosa, utiliza Gildo Insfrán).
Consecuentemente el gobierno del presidente ficticio Alberto de la Fernández, que es decir la tercera presidencia / reinado de Cristina Fernández de Kirchner, hoy con Sergio Massa fungiendo como presidente de facto, ministro de economía y candidato presidencial, hace campaña electoral demonizando a la oposición.
La estrategia del kirchnerismo, y sobran declaraciones al respecto, es infundir dudas y miedo a la población, terror finalmente, sobre las consecuencias violentas de votar opciones opositoras anunciando con el total descaro de las "anibaladas" el caos que sobrevendría y la sangre que correría por las calles con gobiernos de Derecha, que para ellos serían indistintamente Javier Milei y Patricia Bullrich.
Debo decir que por suerte no gobierna la Derecha. Así queda bien claro que este desastre creciente es todo kirchnerista.
Y en tal sentido la vocera presidencial Gabrila Cerruti o el ministro de Seguridad Aníbal Fernández, a tono con la gritería amenazante de Juan Grabois, pueden decir impunes como siempre cualquier delirio, mas los indicios y el contexto alimentan con toda lógica la hipótesis que esta movida de saqueos viene del oficialismo y no tiene por finalidad hacer caer al gobierno sino atemorizar al electorado, especialmente al que no fue a votar, y eventualmente en caso de perder las elecciones condicionar a quien lo suceda.
Sin duda es un juego peligroso en un país al borde de la hiperinflación, tan arriesgado como lo son los manotazos de ahogado. Y si se les va de las manos será porque perdieron toda noción de realidad. No se puede jugar con nafta a ser los amigos de Zoolander en la estación de servicio...
Toda operación de falsa bandera cae en el ridículo cuando la sobreactuación choca con la evidencia, y eso exactamente es lo que se percibe al escuchar y ver a la vocera presidencial Gabriela Cerruti atribuir a La Libertad Avanza organizar esos hechos diciendo: "esta es una operación armada por la gente de Javier Milei que tiene por objetivo generar desestabilización y tiene como objetivo generar incertidumbre e ir contra la democracia, porque son profundamente antidemocráticos".
Es inaceptable que con un "presidente" ausente su vocera atribuya los saqueos a un candidato presidencial sin ninguna prueba y acuse a todo un espacio político que obtuvo el 30% de los votos de ser antidemocrático. Siguen aferrados los kirchneristas a aquellos postulados con los que Carta Abierta, al mejor estilo del doblepensar orwelliano, justificaba la apropiación facciosa de conceptos como Patria, Justicia y Democracia, por lo cual todo lo que no sea kirchnerismo es enemigo de la Patria, la Justicia y la Democracia.
En la ponderación de todos los datos, no puede soslayarse que el kirchnerismo es una asociación ilícita con un proyecto totalitario que lidera una corrupta condenada por defraudación al Estado.
Cierro este breve artículo transcribiendo el acertado posteo en Twitter de un tal Ignacio (@Ignacio10427047) quien subraya la grotesca contradicción del discurso kirchnerista en relación a Javier Milei:
"Según dicen ese candidato no tiene estructura para fiscalizar, ni para gobernar; pero si tiene para organizar saqueos en varias provincias y puntos del conurbano. No tiene remate".
Ariel Corbat, La Pluma de la Derecha,
un liberal que no habla de economía.
Siempre certero, Ariel. Lamentable cuadro de situación presente y futura: No veo quien pueda liderar un cambio tan drástico, preparado por años entre mala intención y desidia aplicadas. Horrible deja vu de mis años en países sin solución ni futuro. Fuerte abrazo, Fernando Gallardo
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